BIENVENIDA

Hola ha todos, les doy la bienvenida a este pequeño blog, en que trato de compartir mi misión que el Padre me encomendó: "Id, pues, y haced mis discípulos a todos los habitantes del mundo" (Mt, 28, 19). Espero que sea de su grado y si alguien tiene alguna consulta o duda de su fe puede tranquilamente preguntar, que dentro de lo poco que puedo saber, tal vez pueda ayudarlo.Sin mas que decir nuevamente bienvenidos, su amigo Danny.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Formación de catequistas… nunca aprendes lo suficiente

Para ser catequista no es solamente dar catequesis… sino también debe uno tener formación. Yo tuve la oportunidad que mi grupo de catequesis me haya enviado a una escuela de catequistas y logrado terminar todos los ciclos que implicaba. Pero mas allá de quedarme con ello, siempre busco participar de otras actividades o talleres de formación. Es importante hacerlo porque con ello aprendes un poco más sobre cómo dar una buena catequesis, además de conocer y compartir tu vivencia de grupo con otros catequistas, ello te nutre y te ayuda a colaborar para el crecimiento del grupo.

Así como yo, existen muchas personas que siempre buscan formarse más y más, pero también están las que tras un tiempo de formación creen que ya lo saben todo. Alguna vez he escuchado frases como “yo ya he terminado la escuela para catequistas, no necesito aprender más” o “tengo suficiente formación como para ir a una escuela de catequistas”. A las personas que alguna vez han dicho estas frases o otras parecidas les digo que uno nunca llega a aprender todo, siempre hay algo más que nos falta aprender, es por ello que la formación de un catequista debe ser PERMANENTE.
Los tiempos cambian y los jovenes tambien, es por ello que es necesario que nos preparemos para todo lo que en el futuro se nos viene, recordemos que ser catequista es como ser una especie de profesor: siempre hay algo nuevo que enseñar y algo nuevo que aprender, y nos corresponde estar siempre listos.

Para ser catequistas debo ser… paciente

La paciencia es una de las actitudes que muchas personas no saben mantener, y para ser un buen catequista uno debe de aprenderlo. Seguramente ya algunos saben el por qué, simplemente que durante el tiempo en que des charla vas a conocer miles de personas (niño, jóvenes y adultos) con diversos tipos de comportamientos (desde los que son amigueros a más no poder hasta los tímidos). He imagínate que tenerlos a todos juntos durante las charlas, obviamente que muchas veces los mas habladores se distraerán mucho, mientras que será muy difícil sacarle unas palabras a los tímidos. Un grupo muy diverso.

Es por ello que para poder guiar bien al grupo, es necesario que tengamos paciencias y no la perdamos, para así lograr que los jóvenes puedan atenderte y entender lo que quieres decirles. Busca siempre algún trabajo, medio audiovisual o dinámica para que pueda ser el punto de inicio para que los catequizandos comiencen a expresar sus ideas. Eso nunca falla.