Bueno, aunque si hay diferencia en dar la catequesis a niños y a jóvenes, este no es un gran dilema. Para mi darle catequesis para jóvenes no me fue muy difícil, pero para aquellos que tienen este dilema, este es mi consejo:
Tengan paciencia, muchos de los comportamientos de un joven podría hacerlos sentir incómodos o molestarlos, pero tengan paciencia con ellos, ellos necesitan un guía y para eso estamos cada uno de nosotros.
Hay que ganarse la confianza de los jóvenes, para así poder hacer que los chicos participen en las reuniones, y así poder comprender un poco como son o como es su vida.
Y siempre hablarles con ejemplos usando sus temas de interés o sobre las cosas les afecten o preocupan. Así ellos podrán atención a lo que uno dice.
Pero sobre todo pidan a Jesús, para que sea él quien les hable y llegue al corazón de estos muchachos y les transmite su mensaje de amor.
Espero que este consejo le ayude a todos y a cada uno de ustedes.
Que Dios les cuide.